Pensar.

Siempre es lo mismo. Siempre la misma historia, siempre lo mismo. Y me confunde, pero sabes ahora que ya he pasado por esto, ya me ha pasado más veces, si tengo que admitirlo, y no no doy aprendido de lo sucedido. No, no considero malo lo que me ocurre, pero es algo realmente confuso. No sé. La verdad es algo raro, realmente. No sé que creer, ya no sé que es esto. La verdad, lo mejor que puedo hacer es no hacer caso alguno a todo esto, olvidarlo y simplemente esperar que todo suceda, poco a poco, y que el mundo decida, que el mundo diga lo que va a ocurrir. Pasar de ello, dejarlo libre y vivir tranquila, sería taaaaaaan fácil, ¿no? 

No, yo no soy de esas personas. Yo me preocupo demasiado por las cosas que ocurren, ya no es preocuparme, es darle vueltas en la cabeza, pensar, pensar me mata poco a poco.

El insomnio tiene la culpa, desde que era pequeña lo sufro. Tardo mucho, mucho en quedarme dormida. Y por ello eses minutos, quizás más que minutos, corroen mi mente, me hacen pensar. Y pienso en lo que ocurre cada día, y es que a veces llega, y me quedo dormida antes de comenzar a desvariar, antes de comenzar a perderme en mis pensamientos. Pero otras veces, no me quedo dormida, y comienzo a pensar cada vez más y más y ahí es cuando comienzo a pensar demasiado , a preocuparme. Y no, no me gusta, para nada.
Tendré que aprender, aprender a olvidar, aprender a no pensar tanto, aprender a no preocuparme, aprender, aprender a vivir tranquila sin preocupaciones.
Pero sinceramente, creo, que nadie en este mundo es capaz de hacer eso.[…]